martes, 28 de febrero de 2012

El número 2 de la revista Amazings, a la venta



El plan de tres pirados (Irreductibleaberron y maikelnai) para conquistar el mundo sigue su curso. Primero crearon la web de divulgación científica Amazings, donde en menos de dos años han juntado a casi un centenar de colaboradores de reconocido prestigio de todos los ámbitos de la ciencia y que recibe miles y miles de visitas diarias.

No contentos con ello, más tarde se les ocurrió la maquiavélica idea de lanzar, no una revista cualquiera, sino una de más de cien páginas, a todo color y sin publicidad alguna: la revista Amazings. Y quisieron publicarla bajo la fórmula de financiación colectiva o crowdfunding, ahí es nada ¿Unos temerarios? A la vista de los resultados, todo lo contrario: necesitaban 16.000€ y recaudaron 24.948€. Estos tíos son unos visionarios.

Ahora amenazan con repetir el éxito que supuso el primer número de la revista y han abierto el plazo para conseguir el Número 2 utilizando el mismo sistema: la plataforma de crowdfunding Lanzanos.

De nuevo, la revista constará de unas 100 páginas a todo color y sin publicidad en la que se abordarán en profundidad, pero de manera amena y sencilla, los siguientes temas:

Sugerente, ¿verdad? Pues no soy el único que lo piensa. Hace apenas una semana que empezaron y ya han cubierto 2/3 de los 15.000€ que necesitan para hacer realidad este proyecto en papel –básicamente, pagar la imprenta y la distribución-. Como no se realizan reediciones de la revista, mi consejo es que no esperes más y reserves tu ejemplar ahora mismo

Yo ya lo he hecho, :-)


miércoles, 22 de febrero de 2012

Eclipse de Sol desde el Solar Dynamics Observatory

Ayer, 21 de febrero de 2012, el Solar Dynamics Observatory (SDO) presenció un fenómeno realmente hermoso: durante más de una hora y media, vio a la Luna pasar por delante del Sol, bloqueándolo en parte. Es decir, fue testigo directo de un eclipse de Sol parcial.


El  SDO es un telescopio espacial de la NASA que orbita a 36.000km de la Tierra y se dedica a estudiar el Sol. Lanzado hace poco más de un año, los instrumentos que lleva a bordo miden las temperaturas de las diferentes capas del Sol y proporcionan imágenes a distintas longitudes de onda del campo magnético en la superficie solar. Ayer, en todas las imágenes que tomó durante el eclipse solar parcial, apareció un convidado de excepción: la Luna. 






¿No son fascinantes? Simplemente añadir que en las últimas tres imágenes se puede apreciar con claridad un “pequeño” grupo de manchas solares. (Aunque de pequeño no tiene nada: es más grande que Júpiter y tiene por lo menos diez veces el tamaño de la Tierra.)

Combinando diversas imágenes como las anteriores, los científicos del SDO han creado este breve pero estupendo vídeo en el que se puede apreciar la secuencia completa del eclipse solar.


Cada año ocurren varios eclipses solares de este tipo que, aunque sólo son visibles desde el SDO, nos ofrecen algunas imágenes memorables como las anteriores y permiten a los científicos comprobar y calibrar sus instrumentos.  

miércoles, 15 de febrero de 2012

Denis Papin, el inventor de la olla a presión

Desde hace ya tiempo, los más renombrados chefs mundiales recurren a la ciencia para intentar mejorar sus recetas: es lo que se conoce como gastronomía molecular. El año pasado se inauguró en España la primera facultad de Ciencia Gastronómica. Y la semana pasada nació la primera revista internacional que aúna ciencia y gastronomía, Internacional Journal of Gastronomy and Food Science. Hoy en día, combinar ciencia y gastronomía está de moda. Pero a Ferrán Adriá y compañía se les adelantó, hace más de 300 años, el francés Denis Papin, el inventor de la olla a presión.


Papin nació en 1647 en Blois. Después de estudiar medicina, se trasladó a París en 1673, donde ejerció de ayudante del físico holandés Christian Huygens. Fue entonces cuando Papin empezó a estudiar la posibilidad de aprovechar la energía producida por el vapor de agua a presión. En 1675 acudió a Londres para presentar los trabajos de su maestro ante la Royal Society, la sociedad que agrupaba a los científicos más importantes del país. Allí conoció a Robert Boyle, uno de los fundadores de la Royal Society, quien le propuso quedarse y colaborar con él.

Durante su estancia en Inglaterra, Papin desarrolló la primera olla a presión, un recipiente (B), hecho normalmente de latón, que se cerraba mediante una tapadera (C) y un tornillo (D) roscado en un soporte (F). El agua hervía en una pequeña caldera (A) en la parte inferior del aparato y el vapor se acumulaba en el interior del recipiente generando una elevada presión. El aparato contaba además con una válvula de seguridad (E), que se ajustaba mediante un peso (W) y la acción de una palanca (G), para evitar que la olla explotase en el caso de que la presión del vapor aumentara demasiado.


A medida que se calentaba el agua en la caldera, el vapor atrapado en la olla elevaba la temperatura de cocción a más de 100ºC, por encima incluso de la temperatura de ebullición del agua. Este vapor muy caliente cocinaba la comida mucho más rápido que los métodos usados en la época, y hasta los huesos se ablandaban.

Papin presentó su invento en un libro publicado en 1681 y cuyo título lo dice todo: A new digester or engine for softning bones containing the description of its make and use in these particulars: cookery, voyages at sea, confectionary, making of drinks, Chymistry and Dying, with an account of the price a good big engine will cost, and the profit it will afford. O sea, Un nuevo digestor o máquina para ablandar huesos conteniendo la descripción de su fabricación y uso en estos particulares: cocina, viajes por mar, confitería, fabricación de bebidas, química y tintorería, con un cálculo del precio que una máquina buena y grande puede llegar a costar y el beneficio que se puede obtener. (Yo pensaba que la palabra digestor no existía, pero al buscarlo en el diccionario me encontré que es “una vasija fuerte de loza o metal, cerrada a tornillo, para separar en el baño de María la gelatina de los huesos y el jugo de la carne o de otra sustancia”.)


Papin empieza su libro describiendo la olla e indicando cómo debe utilizarse de forma segura, lo que incluye saber la presión a la que está sometido el recipiente y el calor en su interior. Luego, como buen científico, realiza una serie de experimentos con alimentos de todo tipo, desde distintos tipos de carne y pescados, y describe sus resultados. Todos ellos se pueden considerar como verdaderas recetas de cocina, algunas de ellas muy útiles para la época. Por ejemplo, en los viajes por mar no se llevaba carne a bordo porque se ponía en mal estado; Papin demuestra que su invento puede cocinar gelatina a partir de huesos secos de animales como vaca o cordero, lo que podría ser un buen sustituto de la carne en las largas travesías marítimas. El digestor de Papin también sirve para cocinar platos de repostería e incluso fabricar bebidas como vino o zumos. Por último, Papin explora las posibilidades del digestor para otros experimentos más científicos, como su acción sobre determinados tintes y en cuerpos duros como el ámbar o el marfil.

El libro es una delicia, un auténtico tratado científico-culinario que merece la pena leer. Está disponible en la red en alguna página especializada (por ejemplo, puedes buscarla aquí), aunque es necesario estar suscrito para acceder a su contenido. No me resisto a dejaros aquí el índice del libro, como botón de muestra.


En 1682, Papin hizo una demostración de su invento cocinando en él una comida para los miembros de la Royal Society y para Carlos II, rey de Inglaterra, amante de la ciencia y que había ayudado a fundar dicha sociedad. Entre los presentes estaba John Evelyn, célebre escritor y horticultor, que registró lo siguiente en su diario:

"12 de abril de 1682. Fui esta tarde con varios de los miembros de la Royal Society a una cena en la que todo fue cocinado, tanto la carne como el pescado, en los digestores de Monsieur Papin, en los cuales los huesos más duros de la carne de vaca y la carne de cordero se hacen tan suaves como el queso, sin agua u otro licor, y con menos de ocho onzas de carbón, produciendo una cantidad increíble de salsa; y para finalizar, hizo de los huesos de carne de vaca una jalea, la mejor en cuanto a claridad y buen gusto, y la más deliciosa que yo había visto o probado jamás. Comimos el lucio y sus espinas, y todo sin impedimento; pero nada superó a las palomas, que sabían justo como si se hubiesen horneado en una tarta, todas ellas guisados en su propio jugo sin añadir nada de agua…. "

A pesar de lo contento que salió Evelyn de la comida, la olla de Papin no prosperó. Se dice que él mismo lo ofreció al rey Carlos II para su uso en hospitales, pero al parecer la oferta fue rechazada. Es posible que su uso no estuviese perfeccionado todavía, y que fuese difícil controlar la presión de vapor de la olla, a pesar de la válvula de seguridad, con los riesgos que ello conllevaba. Tampoco estoy muy convencido de la robustez del recipiente, y hasta qué punto era capaz de soportar las altas presiones en su interior, sin que se rajase el molde después de varios usos.

Lo cierto es que el digestor de Papin no pasó de ser un estudio científico más, aunque sentó las bases para la cocina a presión y convirtió a su inventor en un pionero de la gastronomía científica en el siglo XVII. Tendrían que pasar más de dos siglos para que se inventase la olla a presión moderna tal y como la conocemos hoy.


NOTA: Esta entrada participa en la VII Edición del Carnaval de la Tecnología que organiza Gabriel García en su estupendo blog Zemiorka.

viernes, 10 de febrero de 2012

Primer aniversario de La Aventura de la Ciencia


Hoy es un día muy especial para este blog: se cumple el primer aniversario de La Aventura de la Ciencia. Hace exactamente un año, el 10 de febrero de 2011, se hacía realidad una idea que me rondaba la cabeza desde tiempo atrás y publicaba la primera entrada de presentación del blog. Y aquí estoy, un año más tarde, pero igual de nervioso que aquel día.

Es increíble cómo pasa el tiempo. Cuando hace un año nació este blog, no me puse ninguna meta, salvo la de disfrutar con lo que escribía e intentar crecer poco a poco. Como ya contaba en la presentación, estoy acostumbrado a escribir artículos de varias páginas para la revista ¿Cómo ves? y tardo semanas en terminarlos. Una de las cosas que más me preocupaba era ser capaz de escribir con la regularidad que requiere un blog (al menos como yo lo entiendo). En ese sentido, estoy contento con el primer año: 64 entradas es más de lo que me había planteado inicialmente, aunque también hay que admitir que no son muchas, apenas una por semana.

Por otro lado, es difícil disfrutar con lo que se escribe si luego nadie lo lee. Los primeros meses fueron duros, con muy pocas visitas. Es verdad que apenas hice nada por darle publicidad al blog, y así es complicado que alguien llegara hasta él. Además, la “competencia” es muy dura: la red está llena de blogs científicos de altísima calidad, sólo tienes que echarle un vistazo a mi blogroll. Los distintos Carnavales científicos que se celebran todos los meses han sido la plataforma ideal para dar a conocer el blog; este primer año he tenido la honor de albergar el Carnaval de la Física, el Carnaval de Matemáticas y el Carnaval de Química, además de participar en todas las ediciones que he podido de ellos y del Carnaval de Biología (tengo la espinita clavada del Carnaval de la Tecnología, pero eso es algo que voy a zanjar muy pronto). Abrí una página de Facebook del blog, aunque ahí me dedico a enlazar lo que otros publican y, salvo raras ocasiones, no comparto nada de lo que aquí escribo (no sé si eso es una decisión acertada, pero me gusta). En octubre me abrí una cuenta de Twitter, otro gran acierto, puesto que en esta red social es donde se mueve todo. A partir de entonces, somos cada vez más los que nos reunimos por aquí, lo cual me anima a seguir con esto. A todos los que habéis visitado alguna vez este blog, os digo de corazón MUCHAS GRACIAS. Mientras vosotros queráis y yo tenga fuerzas, aquí podremos charlar de los últimos avances científicos, comentar noticias curiosas y recordar pasajes de la historia de la ciencia poco conocidos. 

En un principio, tenía la intención de incluir ahora la clásica lista de las diez entradas más visitadas. Pero, bien pensado, si son las más visitadas hay muchas posibilidades de que ya las hayas leído. Así que me vas a permitir, querido lector, que me tome la licencia de repasar algunas de las entradas que más me gustan, aunque no sean de las más visitadas.

Joseph Rotblat, ciencia y conciencia.- Premio Nobel de la Paz, Rotblat es una figura ejemplar por el que siento una especial admiración.

Una capa de invisibilidad temporal.- Una noticia que vuelve a estar de actualidad, de la que el blog ya se hizo eco hace unos meses.

El armonógrafo.- Un instrumento con muchas implicaciones tanto matemáticas como físicas. Algún día intentaré construirme uno.

¿El mejor abstract de la historia? – Seguramente no, pero espero que al menos leer esta entrada te arranque una sonrisa.

Pasaje a Dover.- La historia de la huída de Einstein de Alemania, contada con la excusa del descubrimiento de su pasaje a la ciudad portuaria inglesa.

Biografía de un matemático llamado James.- Era matemático, pero se convirtió en el delincuente más famoso de su época…¿Sabes quién era James?

Lavoisier y la transmutación de los elementos.- La clásica historia de cómo Lavoisier derrumbó la vieja teoría de los cuatro elementos.

No quería terminar esta entrada cumpleañera sin agradecer a la persona que me aguanta todos los días y acepta (porque sabe que me gusta) que le dedique a esto más tiempo del que debería. Cristina, sin tu apoyo, ésta y tantas otras cosas no serían posibles.

Y ya que últimamente le estoy cogiendo el gustillo a incluir algo de música en las entradas, me voy a despedir con una canción muy especial, que tengo como tono de llamada en el móvil desde hace muuuchos años (al principio, cuando los móviles no reproducían mp3, tenía una versión midi que era la bomba). Se llama Miles (ése es su nombre original, y no Milestones) y es de un tal Miles Davis… 




domingo, 5 de febrero de 2012

Outside In, la película



Aquí donde lo ves, este fabuloso vídeo está formado por más de 30.000 fotografías tomadas por la sonda Cassini durante su misión en Saturno. Y es sólo una muestra de un proyecto mucho más ambicioso que su autor, Stephen van Vuuren, tiene entre manos desde hace varios años: realizar una película sin ánimo de lucro para proyectarse en pantalla IMAX, basándose únicamente en imágenes capturadas por la sonda Cassini. La película se llama Outside In y con un poco de suerte verá la luz este mismo año.

Outside In es un proyecto descomunal, en el que se van a utilizar cientos de miles de fotografías con una resolución de 5,6k (5600x4200 píxeles) para crear la sensación de movimiento. Y todo esto lo ha hecho Stephen en solitario, con la única ayuda de los mismos programas informáticos que muchos de nosotros tenemos instalados en nuestros ordenadores. Nada de imágenes generadas por ordenador ni efectos especiales, sólo fotografías reales retocadas ligeramente para mejorar el color y otros detalles similares. Y como alguno ya lo ha puesto en duda, Stephen nos enseña en este otro vídeo algunas imágenes que todavía tiene pendiente para la película y en el que se puede apreciar que utiliza únicamente fotografías reales.


En principio, la película no tendrá narración, pero contará con una potente banda sonora. La idea de van Vuuren es estrenarla en teatros IMAX, planetarios y museos. Será una mezcla de poesía visual y documental científico, rozando la película de animación, que en pantalla grande se puede convertir en una experiencia única para el público.

La expectación que ha levantado estas primeras muestras de su trabajo ha sido enorme, y las visitas a sus vídeos se cuentan por millones. Desde luego que un servidor piensa ver la película cuando la estrenen a poco que tenga oportunidad. No sólo se trata de un proyecto admirable y altruista, sino que además me ha dado en la fibra sensible con su dedicatoria de la película:

En memoria de Carl Sagan y Stanley Kubrick

MÁS INFORMACIÓN:

miércoles, 1 de febrero de 2012

Resumen de la XI Edición del Carnaval de Química



Acaba de terminar el mes de enero y con él la XI Edición del Carnaval de la Química. Lejos queda ya aquel día en que, entre comilona y comilona navideña, se me pasó por la cabeza organizar la XI Edición del Carnaval de Química. Primero hablé con Dani Torregrosa, el padre de la criaturay luego con David Castro, el organizador de la X Edición que todavía estaba en curso. El primero me animó a organizarla y el segundo me cedió encantado el testigo.

La decisión no pudo ser más acertada. He disfrutado mucho en mi papel de anfitrión del Carnaval de Química y la temida cuesta de enero se me ha pasado volando. Tengo que admitir que estoy gratamente sorprendido con la respuesta que ha tenido el Carnaval de Química entre los blogueros. En total, han sido veinticinco aportaciones desde dieciocho blogs distintos, tocando temas de lo más variado: historia de la química, bioquímica, astroquímica, nanoquímica, tecnología…Y también he podido comprobar de primera mano el tirón que tiene entre el público: ha sido el segundo mes con más visitas en la corta historia de este blog, y las dos entradas más leídas han estado relacionadas con el Carnaval. Pero lo mejor no ha sido eso, sino que he podido aprender algo nuevo de química con cada entrada, cosa que me viene estupendamente, porque la tengo algo oxidada. A todos los participantes, ¡muchas gracias por la calidad de vuestras aportaciones!

Pero vayamos ya con lo importante, que es el resumen de las entradas de la XI Edición del Carnaval de Química.

LISTA DE CONTRIBUCIONES

Todo es Química también en 2012Esta entrada de Patricia Rodríguez  es un canto a la química y nos recuerda que, aunque ya haya terminado el Año Internacional de la Química, esta ciencia sigue siendo tan básica y fundamental como siempre. ¡Claro que sí!

La menopausia y los alimentos funcionales ricos en isoflavonasNo es la primera vez que José Manuel López Nicolás denuncia la publicidad engañosa de las grandes empresas en muchos alimentos funcionales; en este ocasión es el turno de los enriquecidos con isoflavonas. Ya anticipo que no se salva ni la Wikipedia.

Lavoisier y la transmutación de los elementosMi aportación narra cómo el padre de la química moderna desmontó la vieja teoría de los cuatro elementos. Su receta: medir cuidadosamente las cantidades que intervienen en las reacciones.


Los cristales que leen el temperamento y los cristales líquidos (la ciencia explica)Vicente nos explica el comportamiento de determinados cristales que se utilizan en pulseras y anillos, y que cambian de color según su temperatura y ¿el estado emocional de su dueño?

El descubrimiento del fósforo en el cuadro "El alquimista" de Joseph Wright. Dani Torregrosa combina en esta entrada química y arte. Por un lado, la química del descubrimiento del fósforo por parte de Henning Brandt; por otro lado, el arte de Joseph Wright al plasmar en el lienzo su visión de dicho descubrimiento.

¿Qué nombre le ponemos al gen? No cabe duda que la genética es una ciencia en auge. Menos conocida es la rutina de nombrar a los genes que se descubren. Eso es lo que explica José Miguel Mulet en esta entrada, que seguro que te provocará más de una sonrisa. 


La muerte silenciosa. El envenenamiento es una de los métodos criminales más antiguos. Guillermo Marina repasa alguna de las muertes más famosas y detalla la técnica utilizada. Muy interesante, pero mejor no ponerlo en práctica.
 

El hongo y el gorgojoEn su primera aportación, Manuel Sánchez nos cuenta la historia del picudo rojo, un escarabajo que ataca a las palmeras y cuyo remedio podría ser un bioinsecticida, en concreto, un hongo que infecta al escarabajo.


Adiós a las baterías de litio, llegan las baterías recargables de aluminio. El litio de las baterías es escaso y su precio se ha disparado en los últimos años. Según Francis Villatoro, las baterías de aluminio son una alternativa prometedora que tienen múltiples ventajas. Y si él lo dice...

La regulación del primer metabolismo prebióticoCon su rigor habitual , César Tomé se adentra en los orígenes del metabolismo celular y la importancia que tuvo en el surgimiento de la vida.


¿Qué número le ponemos al gen? Después de explicarnos las peculiaridades de los nombres de los genes, ahora José Miguel Mulet hace lo propio con los números que acompañan al nombre. Es el complemento perfecto a su anterior entrada.


TDR-TB. Unas siglas que meten miedo. Manuel Sánchez se hace eco y destripa una noticia ciertamente inquietante: la aparición en la India de un brote de tuberculosis resistente a los antibióticos.


¿El ATN fue el primer material genético de la vida?  Uno de los retos de la ciencia es entender cómo se originó la vida en nuestro planeta. David nos cuenta cómo las últimas investigaciones apuntan a un ácido nucleico llamado ATN.


Química orgánica ultrafría en el medio interestelarUna nueva ruta química a muy baja temperatura para la síntesis del naftaleno podría ayudar a nuestra comprensión del Universo y a reducir las emisiones tóxicas en los motores de combustión interna.


La bioquímica se va a las artes marciales mixtas en UFCEn una de las entradas más sorprendentes de todas las ediciones del Carnaval, Luis Luna nos presenta a Nick Denis, un bioquímico que en sus ratos libres se dedica a la lucha (o viceversa, no lo tengo claro).

Animaciones de la biología imperceptibleDrew Berry es un artista gráfico especializado en animaciones biomédicas. Dani Torregrosa nos deja uno de sus vídeos, donde se recrean los mecanismos de actuación de las moléculas de la vida en nuestras células.  Dani afirma que es imprescindible...y yo estoy de acuerdo.


El antioxidante que se pasó al lado oscuro con la ayuda de un plátanoEl protagonista de esta entrada es la ciclodextrina, una de las moléculas más queridas para José Manuel López Nicolás. En esta ocasión, nos narra sus investigaciones con frutas y verduras -y sus sorprendentes resultados- al intentar evitar la degradación de su color. ¿Quién dijo que la investigación de primera línea no se podía explicar de forma amena y sencilla?


Cines y bichos: Memorias de ÁfricaManuel Sánchez analiza esta famosa película desde el punto de vista de la microbiología. El clásico de Sidney Pollack, hay que admitirlo, da mucho juego: malaria, paludismo, sífilis…


El asalto del entorno a los genes: la Epigenética. Daniel Martín Yerga nos explica de forma clara las bases de la epigenética, que se encarga de estudiar los cambios producidos en nuestro ADN debido a factores externos.


Nanopartículas a medida por métodos químicos. Bernardo Herradón nos pone al corriente de los últimos avances de la nanotecnología, donde la química está adquiriendo un especial protagonismo.


La química a través del espejoHaciendo un paralelismo con la obra de Lewis Carroll, Daniel Gómez nos introduce en la simetría quiral y su importancia capital en bioquímica.


España, sus dos elementos químicos y medio, y el error de Neil deGrasse Tyson. Francis Villatoro utiliza una charla del famoso divulgador científico para repasar la historia de los descubrimientos de elementos químicos por países, centrándose en los que están relacionados con España.


Hundir un barco y mandarlo así a la LunaEn esta deliciosa historia, María Docavo nos cuenta el destino de los barcos alemanes que ellos mismos hundieron poco antes de finalizar la Primera Guerra Mundial. Una pista: llegaron muuuuy lejos.


Las enzimas que juegan con el principio de incertidumbre. Ramón Andrade plantea la posibilidad de que las enzimas se aprovechen de la física cuántica para realizar mejor su trabajo. Fascinante, ¿verdad?


Electrones acrobáticos. José María Gómez nos detalla las propiedades de los electrones, las partículas responsables de los enlaces químicos. (José María me envió por correo electrónico su aportación hace unos días, pero no lo había visto hasta hoy. Desde aquí mis disculpas).

Como han sido muchas contribuciones, recibidas por distintas vías, y tengo mis despistes, es posible que se me haya olvidado alguna, como ha ocurrido con la entrada anterior. En tal caso, sólo tenéis que decírmelo y se rectifica de inmediato.

Y ahora, es un honor dar paso a la próxima anfitriona del Carnaval de Química: María Docavo, que va a albergar la XII Edición en su blog Historias con mucha Química durante febrero, el mes carnavalero por excelencia.

¡Que no pare la fiesta! ¡Que no pare el Carnaval!